El corazon es un tesoro preciado, eso todo lo sabemos, y creo que tambien sabemos que es muy fragil. Es por ello que no se lo prestamos a cualquiera, menos lo regalamos.
No es que el corazon esté siempre impecable e impoluto, o que esté completo. Como dueños, lo descuidamos y a veces no sabemos bien, a quien se lo prestamos ni a quien se lo entregamos. O si lo sabemos, pero interviene la ilusión y nos arriesgamos.
El mio, como el de todos, ha sido golpeado , maltratado pero a su vez tambien a sido cuidado , respetado y anhelado.
Cuando yo te entregué mi corazón, no es que estuviera en la mejor forma, pero si estaba sano , recuperado, restaurado. Confie en entregartelo.
Tu lo recibiste, despues de que en el pasado lo tuviste y no supiste cuidarlo.
Confié en entregartelo una vez mas, a pesar de que ya habias fallado como guardian. Pero esta vez era diferente, habian pasado 13 años. Entonces pensé que en toda tu travesia de vida, habias aprendido a cuidar corazones. Pero estaba equivocada.
Lo recibiste como a cualquier cosa,con descuido. Sin darle la importancia que se merece. No se si asi recibes todo en tu vida, pero descuidaste a lo mas preciado que tengo.
Ni siquiera me lo devolviste, tuve que ir a buscarlo y arrancarlo de su guardian, para poder darle el lugar que se merece.
Y ahora que lo fui a traer y lo tengo en custodia. Costará sanarlo, costará que se recupere. Y es que cada vez su rehabilitación es mas costosa. Y cada vez que se repara queda mas fragil.
Esta vez fuiste tu, quien lo hizo mas fragil. Te pido que me devolvas mi corazón, como te lo entregué.