Una vez llegué al hostal , me dirigí hacia mi habitación. Una habitación muy acogedora, con lockers y 2 literas, ademas de baños privados, agua caliente y secadora de pelo. Todas las camas estaban ocupadas, excepto la mía, la cual tenia un edredón de "plumas" blanco y sabanas.
Cuando bajé al comedor, en la sala, había un joven tocando una agradable pieza de piano, aparentemente, solo una persona le prestaba atención.
Habían personas de todas las nacionalidades en cómodos sillones platicando algunos, otros con su computadora, y algunos otros jugando billar.
Antes de llegar al hostal había visto un supermercado cerca. Así que, después de ver lo anterior descrito, me dirigí hacia el supermercado. El cajero fue un tanto desagradable y descortés, supongo porque no hablaba su idioma. Como al preguntarle, se notaba que no estaba dispuesto a ayudarme, escogí comida que visualmente conocía y al ir a caja , mi único comentario fue "danke" (gracias).
Me dirigí de nuevo hacia el hostal, fui a una mesa vacía y empecé a comer. Escribí a mi familia para mencionarles que había llegado bien. En Internet busqué que lugares quedaban cerca para visitar. Todos los que tenia planeados estaban lejanos, y por la hora (3.30 p.m) algunos ya iban a cerrar. Así que decidí que en mi primer día iría a conocer el Danubio.
Cuando terminé de comer, me dirigí hacia recepción y pregunté como llegar al Danubio. Me brindaron un mapa de Viena, muy completo, y al principio bastante complejo.
En resumen, no entendía nada. La recepcionista amablemente me marcó con círculos las estaciones que llevaban hacia el bajo Danubio. Con bastantes dudas me retiré , comencé a caminar a la estación Westbahnhof.
Llegué a la estación Danubio bajo, y comencé a caminar sin rumbo fijo. Lo primero que divisé fue un barco, vacío. Parecía que en el pasado o en época de verano sería esplendoroso.
Una de mis ideas era ir en barca , barco o cualquier transporte marítimo para navegar por el Danubio. Pero no había nadie.
Así que decidí comenzar a caminar rió abajo. Sentí un poco de miedo, ya que pensaba que tal vez podrían asaltarme o pasarme algo. Pero pensaba: Ni que estuviéramos en Guatemala. Pero mi auto respuesta era: Pero uno nunca sabe...
También se me pasó por la cabeza que podría haber alguna pandilla de neo nazis, o cualquier grupo radical que podría molestarle mi presencia por el lugar.
Habían muchos grafitis pintados, eso le daba un tinte callejero al lugar. El Danubio estaba azul y calmado. A veces, del lado contrario, pasaba una persona corriendo , con audífonos y algunos acompañados de su perro.
Caminando sin rumbo fijo, divisé otro barco. De nuevo sin gente.
Muchos pensamientos se cruzaron por mi cabeza:
Me gusta lo que hago? Como se sentirá caminar por el Danubio con el amor de mi vida? Quien es el amor de mi vida? Como se sienten las personas que pasan corriendo? ,Como se sentirá meterse en el Danubio? Que pensaran las personas al verme, sin compañía? Alguien se habrá dado cuenta de mi existencia? Soy importante para alguien? Lograré conocer a alguien en este viaje? Que pasaría si me quedo aquí para siempre? Alguien me extrañará en Guatemala? A alguien le importaría si me quedo aquí, o allá? Que se sentirá caminar con amigos, estar hablando en este momento? Quien soy?
A lo lejos divise una noria, y sin duda, supe que era el pratter. Pensé que en el camino me encontraría a algún poeta, algún pintor; como en la película... Pero no, mientras mas caminaba, menos gente miraba. Sabía que a la noria tenia que llegar...
Cuando llegué algunas personas estaban entrando al Pratter algunos con niños, otros con sus parejas y amigos.
Observé muy bien todo a mi alrededor, unas capsulas de color naranja llamaron mi atención , pensé: esto parece Chernobil. Todo se miraba muy antigüo y hasta cierto punto desolado. Como que si se hubiera estancado el tiempo.
Lo primero que hice fue dirigirme hacia la noria, pague la entrada. Al entrar, había un pequeño museo, que mostraba maquetas de las modificaciones que había sufrido el parque de atracciones mas antiguo de Europa (Prater) .El cielo estaba lleno de pequeños leds que simulaban estrellas, y las paredes eran espejos. Un lugar sin duda un poco siniestro, lo que me recordó a películas de terror.
Para mi desgracia, al subir a la noria, me guiaron a una góndola donde habían muchos turistas (alrededor de 8-10), los cuales no había visto cuando entré al parque de atracciones.
Solo pensé, de donde habrán salido?
En el momento me moleste un poco, ya que eran turistas muy ruidosos, y yo esperaba entrar a una góndola vacía, y disfrutar de mi soledad. Deseaba que ese momento fuera muy privado para mi. Pero por alguna razón, a todos nos metieron en la misma góndola ( las demás iban vacías).
No sentí miedo alguno, a pesar que me dan miedo las alturas. Vi el atardecer. También pensé muchas cosas, mientras admiraba el paisaje y tomaba algunas fotos.
Al salir de la góndola, me percaté que en una, habían velas y una pareja sentada en una mesa, con lo que parecía una cena y adornos lujosos.
Solo pensé , seguro le pedirá matrimonio. Que hermosa forma de hacerlo!. Todas las góndolas y privacidad para ellos, al anochecer.
Salí de la noria, fui a una tienda de souvenirs. Al salir de ahí, ya era de noche.
Empecé a recorrer todo el parque. Cada vez hacia mas frío. La gente que había visto entrar, salía. Veía de vez en cuando a alguien caminar, pero las atracciones estaban vacías, únicamente se divisaba un juego de sillas voladoras con gente gritando a lo lejos.
Eran ya las 7 de la noche y se podían ver bastantes juegos de terror, y mientras caminaba solo se escuchaba una carcajada de algún diablo de la casa del terror o musica electrodark de alguna otra atracción con la misma temática.
Mientras iba pasando, también podían escucharse gritos de terror pregrabados, supongo que para darle vida, a un lugar que estaba muerto.
De las cosas que mas me gustaron fue un suelo estrellado. Parecían lagrimas brillantes. Suelo iluminado, como que si un pedazo de cielo hubiera caído y estuviera justo ahí para alumbrar mi alma.
Unas estatuillas simulando personas, confundían a cualquiera que pasáramos por ahí. Tuve que acercarme, porque en realidad pensaba que eran dos personas, pero su vestimenta era sumamente rara.
A lo lejos divise un recinto que capturó mi atención. Eran personas que podían volar (indoor sky diving o paracaidismo bajo techo).
Me acerqué y desde fuera pude sentir la calidez que había dentro. Sintiéndome como en el cuento de la niña de los fósforos, empecé a observar como volaban. Pude ver como el tutor le explicaba al alumno la forma de subir, acelerar , girar entre otros. Podia también ver a otros espectadores , que estaban dentro: hablaban, reían y compartían.
Solo me frote las manos, las tenía ya heladas, y me imaginé como aquella niñita de pies descalzos, si la del cuento, podría sentirse ante un suculento pollo asado. Encendí un cigarro y empecé a grabar.
Entonces fue cuando pensé, es hora de regresar. (Video: https://www.facebook.com/WitchyHxryn/videos/1023298524435114/)
Estando en el hotel, fui a cenar y junto a mi tenia una botella de vino tinto. Todas las mesas estaban ocupadas, todos reían y carcajeaban. Empecé a analizar a todos los jovenes extranjeros presentes.
Vi que alguien me miraba. Era un chico rubio, el cual me sonrío. Por instinto le dije "Hi!" (Hola).
Devolvió mi saludo. Intercambiamos algunas palabras y al cabo de un rato fue a bromear con una lindas chicas, el iba con 2 amigos y las chicas eran tres. Asi que solo reí por dentro y pensé, bueno al final es normal que alguien quiera ligar y no solo platicar...
Al terminarme la botella de vino, salí a fumar en el gélido jardín. Habían bastantes personas ahí. Cuando encendí mi cigarro, un asiático se me acerco y me dijo "Heavy drinker eh!". (No hay traducción literal, pero vendría siendo algo como, eh bebedora de grandes ligas). Así que solo reí, me pidió fuego y se quedó platicando conmigo. Era un ingeniero electrónico koreano de Samsung. Me contó que venia con su esposa a vivir la semana santa en el lugar. Hablamos de tecnología y de todo un poco. Se retiró a descansar, y me retiré a recepción para pedir un cargador de teléfono. El turno habia cambiado, y ya no estaba la chica rubia, ahora estaba un atractivo joven, muy amable.
Me preguntó si podia acompañarme a fumar un cigarro, luego me preguntó de donde venía. Al decirle Guatemala, inmediatamente, comenzó a hablarme en español, y me dijo, yo soy colombiano!
Platicamos de como había el llegado a Austria, cuanto tiempo tenia de vivir ahi, cuales eran sus planes...
Fue pasada la media noche cuando me fui a descansar. Ya todas las chicas de la habitación dormían. El vino ya se me había subido un poco a la cabeza y fue entonces como de manera extraña , mi exnovio , despues de mas 7 meses de silencio , me escribió un "hola, como estas?".
Esa noche dormí placenteramente, no extrañé nada. Era como si en esa habitación hubiera dormido toda mi vida.
Miren lo que uno encuentra al estar haciendo como que trabaja!
ResponderEliminarFelicidades por tu viaje.
ResponderEliminarGracias!
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